El retrato del cantautor que se ha convertido en la banda sonora de varias generaciones.
A propósito de Joan Manuel Serrat no se trata solo
de un libro sobre él. Es la biografía de un tiempo y de un país, desde
su nacimiento el 27 de diciembre de 1943 hasta su último concierto
el 23 de diciembre de 2022 en Barcelona, vista a través de los ojos
de un periodista y escritor que le ha seguido desde crío, cuando lo
escuchó por primera vez y pidió a familiares emigradosa Barcelona
que le trajeran sus primeros discos grabados en catalán.
Serrat ha construido la banda sonora de varias generaciones. Ahora,
Juan Ramón Iborra escribe sobre el noi de Poble Sec como si de
un recuerdo se tratase, intercalando capítulos de sus encuentros
y entrevistas, desde que se conocieron en 1973, tras su concierto
en la plaza de toros de Valencia.
Serrat representa, más allá de sus canciones, un ejemplo de
honestidad y de conceptos morales bien arraigados. Nació cuatro
años después de acabar la guerra civil en el seno de una familia
de perdedores, que sufrió la posguerra del estraperlo y las penurias.
Él supo subir a lo más alto. Ahora que se ha jubilado de los
escenarios, merece la pena acercarse al bagaje que nos deja Serrat,
con un manojo de hermosas canciones y una ética a prueba
de insensatos. Y de nostalgias.