Este libro es algo más que una biografía de Alberto Closas. Pretende, en primer lugar, subsanar la inexistencia de una recopilación exhaustiva de su actividad teatral y cinematográfica, así como aclarar cuál fue su origen, ya que mucha gente le cree nacido en Madrid o incluso en Argentina. En segundo lugar, reivindicar la memoria de su padre, Rafael Closas, comprometido con la causa republicana desde varios puestos de responsabilidad en la Generalitat de Catalunya bajo la presidencia de Francesc Macià, hasta el de Conseller en el último gobierno de Lluís Companys en 1938. Ese fue el detonante que provocó el exilio de toda la familia a Francia, en enero de 1939, y posteriormente el de los dos hermanos mayores a Argentina desde París. Su labor se desarrolló siempre en la sombra, lejos de la notoriedad pública. Y su memoria no debe perderse lentamente entre el olvido y la melancolía.
Esta es, pues, también una historia del exilio que padeció una familia que, como tantas otras, sufrió la derrota que, tras la Guerra Civil, dispersó como un vendaval a tantos habitantes de un país dividido y humillado en el que, en realidad, todos perdieron. En este caso, para uno de sus miembros por lo menos, Alberto Closas, el éxito acompañó su deambular y acabó como una historia de triunfos y reconocimientos.
La magnitud del archivo familiar ha permitido a los sobrinos Francis y Silvia la reconstrucción de un período histórico de una ciudad y de un país y entresacar lo mejor de las personas y los personajes, dibujando con sus luces, y también con algunas de sus sombras, un retrato lo más exacto posible de un hombre y su circunstancia, particular y común, propia e intransferible, especial y general. Una vida más, ni más ni tampoco menos.