Vuelve Paul Preston con otro libro imprescindible
para entender nuestra historia reciente.
La Guerra Civil se libró para anular las reformas educativas y sociales de la Segunda República y para combatir su cuestionamiento del orden establecido. Los rebeldes lucharon a favor de los terratenientes, industriales, banqueros, clérigos y oficiales del Ejército, cuyos intereses se habían visto amenazados, y en contra de los liberales e izquierdistas que impulsaban las reformas. Sin embargo, en los años de república, de 1931 a 1936, a lo largo de la guerra y durante muchas décadas después, se siguió fomentando en España el mito de que el enemigo derrotado en la contienda era el contubernio judeomasónico y bolchevique.
No obstante, el presente libro no es una historia del contubernio, del antisemitismo ni de la antimasonería en España, sino que adopta la forma de pequeñas biografías de las principales figuras antisemitas y antimasónicas que propagaron ese mito, y de los personajes centrales que pusieron en práctica los horrores que este justificaba. Desmontar sus falsedades es uno de los objetivos fundamentales de esta obra.